¿Quieres venir a mi nube? Tengo muuuuuuuchos libros para dejarte. ¿Y sabes una cosa? Algunos los he escrito yo. ¿Te gustaría conocerlos?
SOFÍA HABLA CON ROSALINDA
miércoles, 2 de enero de 2013
EL SECRETO DEL HUEVO AZUL
Tenía muchas ganas de leer este libro, en primer lugar porque ha sido el premio BARCO DE VAPOR de 2012 y siempre me llaman la atención las obras ganadoras de premio; en segundo lugar porque ya lo había leído antes un amigo mío, profesor, muy vinculado a la literatura infantil y juvenil (incluso ha sido jurado de importantes premios), con excelente criterio lector, y me había hablado muy bien de él.
Con estos antecedentes me fui a la búsqueda del huevo azul. ¿Y qué me encuentro? Para empezar un libro precioso, de los que ya no se ven. Formato muy grande, tapa dura, con una presencia de lujo, uno de esos libros que da gusto regalar porque quedas como un rey. Pero lo mejor de esta novela es que no solo es preciosa por fuera, porque cuando la abres descubres un universo mágico, una aventura única y fantástica que no por ello deja de estar exenta de mensajes de educación en valores para los más pequeños. Y no solo la historia te fascina, también lo hacen las excelentes ilustraciones de Tomás Hijo, a todo color y a todo tamaño. El libro es una pasada. Creo que editorial SM ha tirado la casa por la ventana con EL SECRETO DEL HUEVO AZUL.
En el país de Dadrev se celebra el cumpleaños de la reina y comienzan a llegar los invitados desde los más recónditos lugares. Es por la noche, tras la cena de celebración, cuando se produce el intercambio de regalos y la reina recibe el suyo: una jaula dorada con un diminuto almohadón en su interior, y sobre él un huevo de color azul celeste. La reina queda maravillada con el obsequio y se interesa en saber su procedencia.
“Majestad, nadie sabe de qué animal se trata. Lo encontró una niña entre unos arbustos, junto a la playa, pero nunca habíamos visto algo así en nuestra región —dijo una de las damas de las tierras del oeste—. Pensamos que, siendo tan singular, sería un buen obsequio para alguien que deseara cuidar de él”.
La reina, fascinada con el regalo, lo acepta gustosamente, esperando descubrir en poco tiempo a qué animal pertenece. Sin embargo, al tener que salir de cacería con la comitiva de invitados durante tres días, deja el regalo en manos de su hijo menor, el príncipe Rolav, demasiado pequeño para acompañarlos en tan peligroso viaje.
Rolav se hace cargo del huevo azul, pero en un descuido el huevo se abre y aquello que alberga en su interior desaparece, porque el pequeño príncipe solo encuentra dentro de la jaula cáscaras vacías.
Se acerca el momento del regreso de sus padres, los reyes, y de toda la comitiva, y Rolav debe admitir ante su madre que no ha sido capaz de cumplir su encargo y que no ha cuidado del huevo debidamente. Es el momento de la cena y la reina le pregunta a su hijo si hay alguna novedad sobre su regalo. “Sí —dice éste—, el huevo se ha abierto”. Cuando todos se interesan en saber qué animal había dentro, Rolav se siente tan apabullado, con tantos ojos sobre él, que es incapaz de asumir su negligencia en el cuidado de tan preciado regalo.
“¡Una lagartija!... Pero es una lagartija distinta a cualquier otra. Es azul, sí, como el huevo. Pero más brillante... Sus escamas son azules y brillantes porque en realidad son... zafiros... y en su pecho las escamas son de color rojo, porque allí no son zafiros, sino rubíes”.
Todos quieren conocer de inmediato a ese animal tan extraordinario, pero Rolav los convence para que esperen a la mañana siguiente, a la hora del desayuno, explicándoles que es una lagartija recién nacida y necesita reposo.
Cuando se retiran a sus habitaciones, Rolav se da cuenta del enorme lío en el que se ha metido y recurre al mago del reino, Noisuli, para que le ayude. El mago le dice que tiene la solución para el problema: decir la verdad. El pequeño príncipe se niega en redondo, no y no, no puede pasar ahora esa vergüenza ante tanta gente. Entonces el mago recurre a una segunda solución, advirtiéndole que entraña grandes peligros. Se trata de viajar al País de las Mentiras, un lugar en el que todas las mentiras se convierten en realidad, por tanto solo tiene que llegar hasta allí y buscar su lagartija falsa, que allí es verdadera. Rolav acepta, y a partir de este momento vivirá una aventura increíble. Conocerá a Rignif, un curioso personajillo que lo acompañará en todas sus andanzas, y tendrá que conocer también a la bella princesa Aritnem, pero ¿encontrará su lagartija? ¿La mostrará a su madre, la reina, y a todos los que esperan conocer a ese prodigio de animal?
EL SECRETO DEL HUEVO AZUL es una historia de corte clásico que nos habla de lo peligrosa que puede resultar la mentira, de los riesgos de fingir, del valor de la verdad, y de cómo con ilusión y voluntad se pueden alcanzar todas las metas. Y ahora que digo esto, ¿se os ha ocurrido leer al revés todos los nombres que he puesto en negrita? Curioso ¿verdad?
Catalina González Vilar, la autora, derrocha ingenio en esta obra dirigida a lectores de entre 8 y 10 años. ¡Y hay más sorpresas! No os lo perdáis. A mí me ha encantado.
Editorial SM. El Barco de Vapor.
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Maribel, eres multidisciplinar. Menuda reseña tan maravillosa que has hecho de este libro. Tras leerla no dejas a la duda de que el premio ha sido merecido.
ResponderEliminarApuntaremos el título-
Un abrazo.
Efectivamente el premio me parece muy merecido, y lo que es bueno hay que difundirlo. Seguro que los Reyes Magos repartirán este año muchos huevos azules.
EliminarUn ozarba.
Muy buena reseña, Maribel.
ResponderEliminarTe voy a revelar un secreto. En este mismo certamen me presenté con NiñodeNadie, un cuento que preparé para la ocasión. Como imaginarás, no hace falta que escriba nada más... es obvio. Simplemente felicitar al ganador y, con más entusiasmo, si cabe, volverlo a intentar en próximos certámenes.
Un abrazo.
Mián Ros
Por supuesto, Mián, no dejes de intentarlo en otros concursos. Yo no he participado nunca en el Barco de Vapor, pero sí lo hice en el Gran Angular y tampoco hubo suerte, sin embargo, confío en mi obra y sigo dando la lata con ella.
EliminarUn abrazo.